Ingredientes:º 200 g de chocolate negro, cortado a trozos
º 90 g / 7 cucharadas de mantequilla sin sal
º 115 g de azúcar granulada
º 3 huevos
º 5 ml / 1 cucbaradita de esencia de vainilla
º 200 g de harina de trigo blanca
º 25 g de cacao en polvo amargo
º 1 / 2 cucbaradita de polvos de hornear
º una pizca de sal
º 175 g de azúcar lustre (glas), para el exterior
Preparación:
Untar de mantequilla dos o más placas de horno. En un cazo de base gruesa puesto a fuego lento, fundir el chocolate y la mantequilla hasta que estén cremosos, removiendo todo el rato. Retirar del fuego. Incorporar el azúcar hasta que esté disuelto. Añadir los huevos, de uno en uno, y batiendo bien después de cada adición. Incorporar la esencia de vainilla.
Tamizar la harina, polvos de hornear y la sal. Incorporarlos gradualmente a la mixtura de chocolate hasta obtener una pasta blanda. Tapar con papel transparente y dejar en la nevera una hora, hasta que la pasta esté firme y mantenga la forma.
Dejar caer estas bolas, de una en una, en el azúcar lustre y rebozarlas bien. Recogerlas con una cuchara agujereada y dar unos golpecitos en el plato para que suelten el exceso de azúcar. Poner las bolas en una placa de horno, espaciadas unos 4 cm.
No hay comentarios:
Publicar un comentario